«Una gran parte de la Psicología convencional está involucrada en el encubrimiento del maltrato emocional infantil y, por tanto, en la incomprensión y perpetuación del sufrimiento psicológico adulto. Miles de personas van de terapeuta en terapeuta, sin que nadie les muestre jamás las obvias conexiones entre su neurosis actual y los graves desamores familiares que sufrieron e incluso siguen sufriendo. La violencia emocional infantil, destructora de millones de personas, es la única violencia del mundo cuyos perpetradores son indultados y protegidos por las instituciones». José Luis Cano Gil* (2022)