Ven amigo,
vive y lánzate
hasta los siglos oscuros,
hasta el techo de las galaxias,
hasta el límite marcado.
Despierta y mira, si puedes,
como este mundo agoniza,
como las manos más sucias
exprimen como a un limón
esta bolita azulada.
Ven conmigo a contemplar
como este sistema mata
de hambre y desesperanza
pueblos que no son rentables,
vidas que no le interesan,
voces de miles de gentes
que no aceptamos su yugo.
Ven conmigo y mira como
militares y banqueros
nos manejan a su anotojo.
Ven conmigo y cállate,
como otros muchos callaron;
callaron para vivir
y se murieron callados.
Levantad los corazones
Entre mares de cerveza,
entre esquemas primitivos
y revoluciones muertas.
¿Dónde quedó nuestra fuerza?
¿Dónde vive el hombre vivo?
¿Aún crees en este sistema?
¿Aún no hueles a podrido?
Todavía nos queda tiempo;
vamos amigo, alza el puño,
nos comieron el terreno.
La historia te llama a gritos,
tu verdad es su veneno…
Millones de hombres libres
rompiendo las telarañas
y millones de intenciones
saliendo de las entrañas
de un sub-mundo a la deriva
gobernado por cabrones…
Las huellas no se borraron
¡Levantad los corazones!
Eugenio Muñoz
Extraído de ‘Los Ojos del Ahogado’. Madrid, Junio de 1999.